El color del orgasmo

Atentas todas: el orgasmo existe -bueno, algunas quizá ya lo sepáis- y, además, tiene color.

Allá por el 99, François Nars decidió poner pigmentos a ese maravilloso tono que deja en la piel una buena dosis de placer sexual: lo llamó, como no podía ser de otro modo, Orgasm. Con este nombre definió una gama de productos con un tono entre rosa y melocotón, desde colorete (el padre de todos los Orgasmos) hasta esmalte de uñas, brillo de labios y un stick multifunción para ojos, boca, mejillas y rostro en general.

Ahora llega a las tiendas un nuevo Orgasmo -y no precisamente el que te produce comprar sin que tu tarjeta muera en el intento- es Nrs Orgasm Illuminator, un fluido para aportar luminosidad a la piel con partículas doradas, melocotón y rosadas. Antes de la base de maquillaje, como iluminador, como toque de color en los párpados o en los labios, como complemento del colorete, incluso en el cuello: las opciones para sentir este nuevo Orgasmo son infinitas. ¿Su precio? 30 euros.

Aunque hay orgasmos que no se pagan con dinero...